Esta mañana, en Oberá, mientras la presidenta del Consejo General de Educación (CGE), Daniela López, y el ministro de la cartera educativa provincial, Ramiro Aranda, participaban de un homenaje a la supervisora Pocha Jalil, docentes irrumpieron en el evento y encararon a los funcionarios por “un aumento salarial“.

Al grito de “basta de mantener a los docentes en la indigencia. Aumento salarial ya”, un grupo de trabajadores de la educación ingresó al Club Social de Oberá, donde se llevaba a cabo el acto de despedida por jubilación de la supervisora.

Si bien estaba presente el ministro Aranda, los trabajadores focalizaron sus reclamos en López, al tiempo que le cuestionaron la circular del CGE que se conoció durante fin de semana, en la cual el organismo solicitó a los coordinadores de educación de todos los niveles y modalidades que instruyan a los supervisores y directores a verificar la efectiva prestación del servicio de los docentes frente al aula.

El tenso momento que atravesaron las máximas autoridades de educación de la provincia fue registrado por los mismos docentes que grabaron el hecho mientras reclamaban un sueldo digno. “Señora López acuérdese de los docentes que están pasando hambre. Basta de circulares. No llegamos a fin de mes“, lanzó un educador cuestionando a la funcionaria en uno de los videos que comenzaron a circular por las redes sociales.

Ante esta situación, la presidenta del CGE y el ministro Aranda tomaron la decisión de retirarse del club en el que se realizaba el homenaje, sin responder a los cuestionamientos y a la solicitud de los trabajadores.

Mientras las autoridades se retiraban del lugar, otra docente continuó cuestionando a funcionaria: “Esta señora quiere cercenar nuestros derechos constitucionales, a ejercer nuestra libertad de expresión. ¿Usted viviría con un salario menor a 300 mil pesos, señora López?” .

Cabe mencionar que los reclamos de los trabajadores de la educación se replican hace varias semanas en diferentes puntos de la provincia y le exigen al gobierno un aumento del 100%.

Para esta semana, los educadores del Frente de Trabajadores de la Educación en Lucha (FTEL) acordaron realizar asambleas en los establecimientos educativos, paro sin asistencias a los lugares de trabajo y movilizaciones en diferentes localidades.

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Las lluvias no cesan en toda la provincia, provocando el anegamiento de rutas, el corte del tránsito sobre puentes como consecuencia del desborde de arroyos y la evacuación de una gran cantidad de familias, principalmente en El Soberbio, donde el río Uruguay esta mañana alcanzó una altura de 16 metros, tres más de lo previsto como índice máximo para la activación del protocolo del comité de crisis local.

Hasta anoche, los relevamientos realizados indicaban que en la ciudad Capital de las Esencias había un total de 30 familias evacuadas de barrios Chivilcoy y Unión, ambos lindantes a zonas ribereñas, los cuales como consecuencia de la extraordinaria crecida del río Uruguay quedaron bajo agua, situación similar a la ocurrida en noviembre y que cada vez es más recurrente.

“Podría haber sido peor, aquí en el río Uruguay tenemos la suerte de que no llovió tanto como en otras partes del centro de Río Grande do Sul en Brasil. Tenemos que evacuar y estamos trasladando a los vecinos a salones principalmente de iglesias que se pusieron a disposición. También a casas de parientes que prestan un lugar a sus familiares”, detalló ayer el intendente Roque Soboczinski, en diálogo con El Territorio.

La crecida del cauce no solo está relacionada a las lluvias récord que azotan a la provincia desde el miércoles, sino también a las precipitaciones registradas en pueblos del sur brasileño, principalmente las localizadas en el estado de Santa Catarina, donde para muchos ya se encuentran ante una de las peores catástrofes naturales de la historia, provocando incluso daños en represas y muertos.

Puentes sobrepasados y rutas anegadas

Las inclemencias del tiempo también se sienten en otras localidades de la provincia. En San Javier, por ejemplo, la situación es parecida a El Soberbio, donde hay familias que esta mañana comenzaron a ser evacuadas.

Sobre la ruta provincial 7, en tanto, el desborde del arroyo Tabay obligó a interrumpir el tránsito, ante lo cual ahora las localidades de Jardín América y Aristóbulo del Valle están desconectadas.

Misma situación se registra en Santa Rita, Mojón Grande y Cerro Corá, que tienen arterias anegadas por crecidas de arroyos y cauces cercanos.

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Por las intensas lluvias que se registraron ayer en Misiones y en los estados sureños de Brasil, las localidades ribereñas de ambos países cortaron los pasos internacionales y suspendieron los servicios de balsas por el aumento del caudal del río Uruguay y se mantienen en alerta ante un pico de crecida para esta tarde.

En el caso de Panambí, la Policía de Misiones informó que el paso fronterizo del pueblo con la ciudad brasileña Porto Vera Cruz se encuentra cerrado para el egreso e ingreso de personas, mientras que el desplazamiento de balsa está suspendido, por la crecida extraordinaria del río Uruguay, el cual por el temporal alcanzó una altura de 6,95 metros y se prevé que el caudal siga creciendo en las próximas horas.

En la localidad de Alba Posse, la Prefectura Naval Argentina (PNA) suspendió el cruce de la balsa con el municipio Mauá del vecino país y, al mismo tiempo, prohibió toda navegación por la afluente en toda la zona, ya que el caudal de agua subió 7,60 metros y “crece de manera brusca”, informaron.

Ya en la ciudad de El Soberbio, el Comité de Crisis se reunió y, tras analizar la compleja situación que dejaron las lluvias, resolvieron cerrar el servicio de balsa con la ciudad Porto Soberbo.

En tanto, solicitaron a la población ribereña estar alerta de como avanza la crecida del río “para posibles evacuaciones” y evitar circular por los barrios Unión y Chivilcoy, para “no entorpecer el trabajo de este comité, que se encuentra monitoreando a cada hora la situación del río y se informará oportunamente”.

Asimismo, el comité comunicó a la comunidad que la altura actual del río es de 10,25 metros y sostuvo que “debido a las precipitaciones en las afluentes de la represa Chapecó, que está liberando 20.800 metros cúbicos, lo que se estima es que en las primeras horas de la tarde tendríamos un pico de crecida en nuestra localidad de 16 a 17 metros de altura“.

Las intensas lluvias que se desataron en las primeras horas del jueves provocaron inundaciones, daños en viviendas y crecidas de arroyos en la zona centro de la provincia. Mientras que en Posadas terminó siendo la jornada más lluviosa desde que se tiene registro en 1956, según precisó el meteorólogo Favio Cabello.

Según indicó el profesional, ayer la Estación de Servicio Meteorológico Nacional, ubicada en el Aeropuerto de Posadas, registró 217 mm, y la estación de la Opad, situada en el centro de la ciudad, anotó una cifra de 228 mm, marcando así un “un récord absoluto”.

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