Susana Camardelli, una mamá del barrio Los Potrillos, de Garupá, contó la situación que le toca vivir por estas semanas a su hijo, Cristian Ezequiel de la Cruz, de 22 años, quien está detenido en la Comisaría Décima, acusado de robar un celular.

Según relató la progenitora a La Voz de Misiones, Cristian “tiene problemas con las adicciones, lo íbamos a internar cuando pasó todo”, recordó la madre frente a las puertas del Juzgado de Instrucción 1, de Posadas.

En este sentido, Susana contó que su hijo fue apresado luego de que una joven del barrio denunció que Cristian le había robado un teléfono celular.

“Hace dos semanas, se presenta la Policía en mi domicilio diciendo que tenían una orden”, relató la mujer y añadió: “Él se resistió, se subió al techo y se arrojó porque no quería ser detenido”.

Susana además aseguró que su hijo, antes de ser trasladado a la Décima, “fue muy golpeado en la Comisaría Quinta por los policías y otros presos”, denunció.

“Me presenté en la comisaría y no me dejaron verlo ni hablar con él, fueron pasando los días y nada, me dejaron verlo cinco minutos nomás”, lamentó ante la cámara de LVM.

Además, aseguró que su hijo no tiene nada que ver con el delito que se le imputa: “Negamos el hecho de robo porque hay testigos de que Cristian estaba con nosotros en el momento en el que la chica hizo la denuncia”.

“Ella no sabía quién era y después amplió su denuncia con dos testigos diciendo que era él, publicó en todas las redes sociales un escrache de mi casa diciendo que yo era cómplice del robo”, adujo Camardelli.

Una venganza

Susana Camardelli sostuvo que “sin dudas, el Negrito Muñoz está detrás de la situación de mi hijo”, dijo la mujer sobre un afamado delincuente local, que la amenaza desde hace un tiempo.

Es que, según relató Susana, hace unos años se desempeñó como presidenta del barrio Los Potrillos, ocasión en la que “me pidieron para realizar una reunión del foro de seguridad para tratar el tema de Negrito Muñoz, un conocido delincuente del barrio”.

“Lo que yo no sabía era que iba a empezar a vivir los peores días de mi vida desde esa reunión”, explicó Susana y amplió: “Desde ahí comenzamos a recibir amenazas de que nos vayamos del barrio porque nos iban a incendiar la casa”.

Asimismo, la denunciante refirió que, dos días de aquella reunión, a la que asistieron altos jefes de la Policía, “un pibe me pateó desde una moto y con un arma en la mano me dijo: ‘Con Negrito Muñoz no se mete nadie’; fui a hacer la denuncia y fue peor”.

“Dos días después me golpearon brutalmente y sólo me pusieron una perimetral, que duró dos años”, recreó Susana, antes de adjudicar la situación de su hijo Cristian a una represalia por parte del grupo delictivo.

En tanto, la entrevistada sumó a su argumento el hecho de que “el año pasado mi marido estuvo preso dos semanas también, por un hecho que no tenía nada que ver”.

“Que caiga que tiene que caer pero no personas ni familias inocentes que están destruyendo”, pidió la madre y cerró: “En el allanamiento en mi casa no encontraron nada, todos los días vivimos hechos de inseguridad en el barrio y no hacen nada”.

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