La autopsia practicada al cuerpo de Priscila Cecilia Díaz (21), la joven madre de una beba de 3 años que ayer fue hallada semienterrada en medio de un pinar de Jardín América, fue estrangulada ya que la causa de muerte fue una asfixia mecánica por compresión efectuada sobre su cuello, según confirmaron fuentes consultadas por La Voz de Misiones.

El informe preliminar de los forenses también deja asentado la existencia de lesiones defensivas en el cuerpo de la joven, en tanto que no hay signos visibles de abuso, aunque se aguardará el resultado de otros estudios complementarios. La data de muerte, en tanto, sería de entre tres y cuatro días.

Esa última información en principio coincide con los testimonios recabados, los cuales señalan que Díaz fue vista por última vez el domingo a la noche, cuando compartía una ronda de tragos junto a otros tres jóvenes del barrio Los Cedros, entre los cuales se encontraba Carlos David Del Valle (21), quien desde ayer permanece detenido como principal sospechoso del femicidio.

En base a los elementos recolectados hasta el momento, se cree que en determinado momento de la noche Del Valle quedó solo junto a la chica y, en circunstancias aún no establecidas, la terminó asfixiando. Una hipótesis es que la haya atacado en medio de un intento de abuso sexual, lo cual también explicaría por qué el cuerpo hallado estaba desnudo y las marcas defensivas relevadas en la víctima.

Otro dato de relevancia en este punto es que al momento de ser detenido Del Valle presentaba lesiones de rasguños en el rostro, cuello y antebrazo.

Por el hecho también está detenido un hermano del sospechoso, de 16 años, quien habría colaborado en la ocultación del cadáver, maniobra que fue realizada en medio de un pinar del mismo barrio Los Cedros.

Fuentes consultadas por La Voz de Misiones señalaron que el caso de descubrió gracias a un testigo clave, quien se acercó a la comisaría local para contar que un conocido suyo había confesado el crimen de una joven y también agregó que su hermano había ayudado a enterrar el cuerpo.

Fue con esos datos que los investigadores de la Unidad Regional IV comenzaron a trabajar en el caso hasta que, ayer a la mañana, efectivamente dieron con el cuerpo y ello decantó en la detención de los dos sospechosos.

La Policía allanó la vivienda de los hermanos, donde secuestraron prendas de vestir que habrían sido utilizadas al momento del hecho. La ropa no solo servirá para futuros reconocimientos por parte de testigos, sino que también será sometida a pericias para determinar si contienen rastros genéticos de la víctima.

Otro elemento incautado fue el teléfono celular del principal acusado, el cual quedó en manos de personal de Cibercrimen para la recuperación de últimas conversaciones. El aparato también contribuirá a reconstruir sus últimos movimientos, además de certificar si pudo haber sido utilizado por Díaz, dado que la joven no tenía celular pero ese mismo domingo se detectó una reactivación de su cuenta en Facebook.

En el caso interviene el Juzgado de Instrucción Dos de Jardín América, a cargo del magistrado Roberto Sena, quien ya dispuso la entrega de los restos de la víctima a sus familiares para su correspondiente último adiós.

Se espera que el principal sospechoso sea citado a prestar declaración indagatoria a comienzos de la semana próxima. Lo mismo ocurrirá con el adolescente detenido, quien será investigado por Sena, pero todas las medidas que se puedan tomar en su contra serán dictaminadas bajo la órbita del Juzgado Correccional y de Menores que dirige Osvaldo Lunge.

Priscila Díaz tenía 21 años y era madre de un niña de 3.

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